Artculo realizado por:
Kerman Sainz de Vicuña
Cuando un ser humano emprende
un proyecto o desarrolla una afición tiene dos posibilidades para
empezar a dar los primeros pasos, por un lado la opción de comenzar
sin conocimientos y sin haber recurrido a lo que otros han dejado
escrito y por otro y el camino mas correcto el que consiste en
ilustrarse e informarse de todo lo que estuviera a nuestro alcance
para llevar por buen cauce esa actividad que a la larga nos formara
como persona y ayudara a discernir entro lo correcto y lo superfluo.
Siguiendo la tónica general
inicialmente comentada y entrando en la materia que nos ocupa os
instamos a informaros en la medida de lo posible en el proyecto que
estéis barajando para llevarlo a cabo y madurar el contexto.
La pregunta mas común a la
hora de empezar por pensar en tener un reptil en nuestra casa es la
de que especie es la mas adecuada para comenzar en este absorbente y
gratificante mundo, pues la respuesta la podemos obtener leyendo el
encabezado del articulo siendo la respuesta que el Eublepharis
macularius o gecko leopardo es el reptil en general y gecko en
particular que mas factores tiene a favor y quizás el que mas “errores”
absorbe sin desencadenar los mismos en grandes tragedias por nuestra
falta de experiencia.
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Pareja de fase
normal |
Es increíble la cantidad de
fases de color que se han conseguido ha día de hoy llevando a la
practica la teoría del padre de la genética Gregor
Mendel a fuerza de ir cruzando ejemplares con unos patrones
de color concretos para asegurar una descendencia con colores
llamativos y bien definidos del cruce de los progenitores y así
sucesivamente y que hoy por hoy es susceptible de ampliarse dichos
patrones sin poder vislumbrar el limite de tales combinaciones por
lo que debido a lo complejo de los nombres y sus respectivos colores
intentaremos mas adelante aclarar este campo dando nombre a las
fases con pequeñas descripciones de los colores predominantes.
Situemos a este precioso
reptil en cuanto a ordenes y familias se refiere diciendo que por
descontado pertenece a la clase Reptilia, orden Squamata, suborden
Sauria, familia Gekkonidae, subfamilia Eublepharinae, genero
Eublepharis para terminar situando al protagonista de la
descripción en la especie Eublepharis macularius.
De origen estos geckos pueblan
las zonas áridas, tales como desiertos y llanuras castigadas por el
calor y faltas de vegetación exuberante de Afganistán, India y
Paquistan por lo que son animales acostumbrados a fuertes
temperaturas y humedad moderada.
De apariencia es un gecko
robusto con la particularidad de poseer parpados con lo que
consiguen una barrera en los ojos contra factores externos y
mantener lubricados sin necesidad de recurrir continuamente a la
lengua para conseguir tal efecto.
La fase común o salvaje es la
que se encuentra normalmente en la naturaleza con una base
amarillenta con puntos negros distribuidos por todo el cuerpo.
Es nocturno cazando y reptando
de noche y descansando durante el día.
Otra característica que
detectamos a simple vista en el gecko leopardo es la forma de sus
patas y dedos que tienen apariencia de garras sin tener nada que ver
con las patas que poseen muchos geckos provistas de laminillas en
sus dedos que les permiten trepar por superficies lisas, la
explicación a tal característica es la falta de necesidad de
trepar que encuentra en su medio natural el gecko leopardo ya que la
arena obliga a reptar con las extremidades bien equipadas.
Para distinguir el macho de la
hembra nos fijaremos en la parte genital y el macho posee poros
preanales en forma de “v” y un pronunciado abultamiento en la
base de la cola donde aloja los hemipenes.
Los reptiles son animales
realmente capacitados para subsistir en sus medios naturales por muy
áridos, hostiles y estériles que estos sean desarrollando un
repertorio de recursos para salir victoriosos en el día a día de
sus difíciles pero fascinantes vidas.
Debido a sus hábitos
nocturnos durante el día descansa en lugares oscuros y con algo de
humedad como pueden ser pequeñas cuevas o debajo de piedras.
Un ejemplo de acoplamiento al
medio que presume el Eublepharis es la utilidad que tiene destinada
su apéndice llamado comúnmente cola que bastante mas lejos de ser
una mera prolongación de su cuerpo tiene la función de reserva de
alimento en forma de grasa que aprovisiona en época de bonanza para
recurrir a su particular despensa de recursos en otras épocas de
mas escasez.
La cola aparte de deposito de
reservas tiene capacidad de autotomía que no es otra cosa que
poseer la capacidad de auto seccionarse en caso de peligro que una
vez que se cercena sigue dando espasmódicos movimientos con lo cual
el atacante dirige su ataque a la cola pudiendo el gecko emprender
una huida segura, con el tiempo la cola vuelve a formarse aunque
adquiere unos tonos oscuros teniendo poco o nada que ver con los
colores de la original incluso siendo su forma menos estilizada
pasando a ser algo atrofiada pero con las mismas cualidades que la
original.
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Ejemplar con
cola regenerada |
Podemos por lo tanto deducir
que el estado de la cola es para el cuidador del Eublepharis un
barómetro de un valor incalculable para seguir muy de cerca el
estado nutricional del ejemplar, en todo momento ha de estar bien
formada, alineada con el cuerpo y con un grosor importante actuando
de inmediato si cualquier síntoma descrito no se cumple ya que el
gecko estará por debajo del limite aceptable de reservas.
Terrario
Hemos citado anteriormente la
falta de capacidad para trepar de esta especie por lo que sus
hábitos diremos que son terrestres, en consecuencia recurriremos a
un terrario que no tendrá demasiada importancia la altura que
tenga, (no menos de 40 cms., hay que tener en cuenta el espacio que
resta el montaje del sistema de iluminación) pero si la anchura
aprovechando la superficie horizontal en detrimento de la vertical.
Pueden considerarse medidas
estándar para una pareja 40-50 cms. de alto por 50 cms. de fondo
por 80 de largo asegurando una buena armonía para la pareja.
El ambiente a conseguir
recordando su medio natural es el de una zona árida del estilo de
un desierto olvidándonos de vistosas y exuberantes plantas por la
obvia razón de que en las condiciones que mantendremos a los geckos
leopardo nunca podrán sobrevivir unas plantas que requieran altos
porcentajes de humedad, por lo tanto nos centraremos mas en plantas
crasas y las que necesiten poco riego y altas temperaturas.
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Escondite
artificial para facilitar la seguridad del gecko |
En el grupo de las crasas
habrá que andarse con vista de no poblar el terrario de cactus
provistos de púas y pinchos porque el resultado de una púa clavada
sin ser vista puede desencadenar en una infección importante si el
tiempo transcurre sin tomar medidas, por lo tanto vayamos a lo
practico y elijamos plantas que con el contacto no den problemas.
No es mala idea echar mano de
plantas artificiales pero siempre que estén bien logradas sus
imitaciones pues la alta humedad no es un objetivo en este tipo de
terrarios.
La decoración no tiene porque
ser austera por el simple hecho ser un terrario de corte desértico,
con un mínimo de gusto y una combinación de colores es posible
crear un ambiente sorprendente poblando de rocas, pizarra, corcho,
piedras y cualquier pieza que nos parezca natural sin necesariamente
ser materia viva.
Cuando coloquemos los objetos
de decoración nos inventaremos cuevas y oquedades con el objeto de
servir de guaridas a los geckos, las estructuras formadas iran bien
aseguradas y fijadas para prevenir fatales desenlaces.
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Terrario para
Eublepharis macularius |
El sustrato puede ser de
muchos tipos, desde papel de periódico hasta mezclas de diversos
sustratos, el papel de periódico por su limitado por no decir nulo
poder decorativo lo dejaremos para terrarios de cuarentena o para
terrarios de cría.
Hay que ampliar la cautela en
la elección del sustrato para descartar todo aquel que sea
susceptible de ser ingerido por los geckos causándoles obstrucción
intestinal, el sustrato ha de ser lo demasiado grande como para no
ser ingerido o demasiado triturado como para no ser peligroso en
caso de ingesta accidental, podemos usar fibra de coco, gravilla de
la medida adecuada que se encuentra disponible en muchas
tonalidades, turba con algo de arena, etc,………
La iluminación no es tan
importante como para especies diurnas pero necesaria para marcar los
foto periodos, acentuar los colores y sintetizar la vitamina D3 en
calcio para que se fije en los huesos.
Un tubo de amplio espectro
uva-b será suficiente acompañado de un spot en una parte
localizada del terrario con la función de marcar un gradiante de
temperatura para que en la mayoría del terrario reine una
temperatura de 25-30 grados y un punto caliente de 32 grados y a la
noche descender a unos 20 grados.
El terrario puede ser de
cristal pero hay que asegurarse de que sea un habitáculo bien
ventilado, dan un resultado bueno los terrarios con rejilla en la
parte alta y en la baja renovándose el aire interior debido al
efecto que causa el aire caliente subiendo a la parte alta y por la
parte baja entrando aire fresco volviendo a subir para ser expulsado
por la rejilla superior.
El fondo puede decorarse con
corcho, pizarra,…..incluso con espuma de poliuretano, esta ultima
decoración es económica y atractiva siendo su manera de aplicar
como si se diera en una pared cualquiera pero dándole formas
rocosas, se deja secar se le aplica pintura al agua y se puede
agregar algo de arena a la pintura para imitar una pared árida.
Alimentación
El gecko leopardo es un animal
prácticamente insectívoro dando buena cuenta de los grillos,
langostas, gusanos de seda, saltamontes,….
Pueden ofrecérseles Zophobas,
tenebrios, galleria pero orientando esta ultima alimentación como
puntual ya que son gusanos con importantes cantidades de grasa.
Suele darse el caso en esta
especie si abusamos de estas “golosinas” de ver una especie de
pelota regurgitada por lo indigesto de la quitina avisándonos de lo
inadecuado de esta practica siendo esporádicamente un buen recurso.
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Langosta |
El Eublepharis es un cazador
consumado y rara es la presa que consigue huir de su persecución y
ataque, aun así no mostrara ningún interés por presas que no se
muevan incluso dándose el caso de no querer saber nada de insectos
que en un momento dado se queden paralizados.
Dispondremos de un recipiente
pequeño y con poca profundidad para que siempre tengan a su
disposición agua aunque la pulverización a veces suele ser
suficiente,
En verano pulverizaremos cada
día el terrario y en invierno si el ambiente no es demasiado seco
una vez cada dos días.
Normalmente el aporte
alimentario que ofrecemos en forma de insectos no suele tener el
total de minerales y vitaminas que requiere el organismo del gecko
por lo que daremos a diario calcio puro espolvoreado en los insectos
y un par de veces a la semana vitaminas espolvoreadas en los insecto
o diluida en el agua.
Cría
El Eublepharis macularius
forma huevos de cáscara blanda llamados así por lo blando de su
superficie cuando están recién puestos endureciéndose
transcurridos unos días aunque mantienen una textura blanda en todo
su proceso.
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Cria de gecko
leopardo |
Las puestas se componen de 2 huevos
que retiraremos del terrario lo antes posible ya que en ese ambiente seco
se deshidratan en pocas horas siendo poco viable recuperarlos a
posteriori.Los huevos los pondremos en un envase con vermiculita o perlita
como sustrato humedeciéndolo con agua en una proporción de 1 entre 1
hablando en peso no en volumen y enterrando los huevos hasta la mitad
aproximadamente.
Durante la incubación se vigilara
que el sustrato se mantenga húmedo hidratándolo con agua cada vez que
sea necesario y haciendo especial hincapié en no mojar bajo ningún
concepto la superficie de los huevos.
La apariencia de los huevos durante
las diferentes etapas de la incubación ha de ser de una textura hidratada
y sin irregularidades de ningún tipo ni manchas, los huevos a medida que
avance la incubación aumentaran de tamaño según el óptimo crecimiento
del embrión.
La temperatura marcara el sexo del
neonato pudiendo elegir el sexo de las crías con el procedimiento de
elección de los rangos de incubación dando a lugar hembras a
temperaturas que ronden los 26-27 grados, igualdad de machos y hembras a
temperaturas de 28 grados y machos a 30 grados.Habra que aumentar la
vigilancia a temperaturas mayores ya que pueden dar lugar a lo que se
denomina comúnmente como “hembras calientes” que son hembras con
aspecto de machos pero sin ninguna opción a tener descendencia en el
futuro.
Las crías cuando nacen tienen una
atractiva coloración que nada tiene que ver con la de los padres siendo
imposible saber que colores iran adoptando de adultos.
Se podrán mantener inicialmente a
las crías juntas pero transcurridos unos 3-4 meses es mas prudente para
asegurar su integridad física separarlos y alimentarlos individualmente
con pequeños insectos acordes a sus pequeñas bocas.
Morphos
A continuación citaremos los
morphos o fases de color mas conocidas aunque hay que tener presente que
estas mutaciones se han conseguido a partir de cruces estando la mano del
hombre directamente involucrada en todas ellas excepto en la que se
denomina salvaje o fase normal que no es otra que la que se encuentra en
estado salvaje.
Normal: La fase primitiva u original
que es de la que parten todas las demás siendo su color base un amarillo
más o menos intenso con puntos negros distribuidos a lo largo del cuerpo.
High yellow: Probablemente la
primera fase creada a partir de cruces selectos con un predominio del
amarillo como su nombre indica.
Pastel: En esta fase lo que se ha
perseguido y conseguido es la total desaparición del negro en su
coloración sustituyéndola por tonos mas claros o pasteles.
Selva (Jungle): Una fase con rayas y
líneas quebradas es el denominador común de este patron.Es una fase que
al tener unos diseños poco claros no aseguran que los progenitores
obtengan una descendencia clara de la fase “selva”.
Nieve (Snow): Nos encontramos,
haciendo gala de su nombre a la coloración más selectiva o extrema de
los geckos predominando el blanco en todo el ejemplar, no obstante en la
etapa adulta es posible que desarrollen un tono amarillento.
Ventisca (Blizzard): Nos hallamos
ante el verdadero Eublepharis macularius “leucistico” puro, hay quien
lo denomina también “plátano”.
Esta lista se puede ampliar
generosamente pero hemos citado por decirlo de alguna manera los morphos
mas representativos del género habiendo infinidad de combinaciones dentro
de cada fase arriba citada siendo un continuo cambio el que se aplica a
esta especie.
Texto y Fotografías: Kerman Sainz de
Vicuña
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